¡Felices fiestas!

13:31 Pat Casalà 4 Comments


¡Felices fiestas! Deseo que las Navidades os traigan ilusiones en forma de lluvia de regalos, aunque no necesariamente sean materiales.  A veces basta un beso, una sonrisa, una palabra o una reunión familiar para sentirse querido, arropado y feliz.
Cierro el blog por vacaciones hasta el próximo día siete de enero. Quiero desearos una buena entrada de año, muchos propósitos positivos y muchas comilonas en buena compañía.

Al regresar os contaré mis proyectos futuros, lo que dejo atrás con el fin de 2013 y emprendo a principios de 2014. ¡Nos vemos el año que viene!  

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¡Feliz Navidad!

9:49 Pat Casalà 10 Comments

¡Buenos días! Hoy tengo ganas de pasarme el día escribiendo, estirada en la cama, con las emociones a flor de piel. Parece que tendremos un día luminoso, agradable y sereno, a ver si las emociones de estas fiestas fluyen con facilidad por los rincones y nos iluminan con los villancicos, las sonrisas y las alegrías de los más pequeños.
Recuerdo cuando era pequeña y llegaban estas fechas, la cantidad de sensaciones que me embargaban al pensar en los Reyes magos y Papá Noel, la imaginación desbordante que me acompañaba por las noches mientras les ponía una historia a esos seres mágicos.
La fantasía era parte de mi día a día, compaginaba la realidad con los mundos paralelos y me encantaba darle color a las situaciones, pintar un ahora a mi medida, con los matices que me llenaban.
Durante mis primeros años en la escritura gasté muchos folios con temas fantásticos, los dones de la naturaleza, la capacidad de profetizar, la parapsicología y las ciencias ocultas siempre me han interesado, por eso me encantó profundizar en estos temas.
Cuando echo la vista atrás me doy cuenta de que mis novelas han evolucionado hacia otro estadio, ahora ya no se nutren de situaciones paranormales ni se llenan de fantasmas, premoniciones, arcanos de la historia, el Tarot…
La realidad muchas veces supera la ficción y hay temas policíacos que nos rodean con los que jugar a la hora de crear una historia. Sin embargo creo que mi mejor argumento es sin duda La Baraja, un thriller policíaco donde los temas fantásticos cobran una importancia vital.
Una trama que se nutre de muchas situaciones y engloba diferentes subtramas interesantes consigue crear una atmósfera intrigante. Está claro que Pam Casas se enfrenta a algo inimaginable y que las piezas de la novela encajan lentamente hasta conformar un puzle intenso.
Los Mundos de Esme es una novela diferente, en un tono más incisivo, con una historia menos complicada y un desenlace más previsible, aunque no carece de giros inesperados. Puri, la protagonista, no se parece demasiado a mí, en cambio Pam sí tiene muchos rasgos míos.
En mi actual novela estoy experimentando y mezclando dos temas importantes, a ver si sale algo digno de ser valorado por mi agente…

¡Feliz Navidad! J     


       

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Escribir...

13:31 Pat Casalà 2 Comments

¡Buenos días! Escribo tarde, tras una clase de baile fantástica, una ducha y un ratito relajada en el sofá, jugando con iPad para que mi cabeza encontrara el tono de esta entrada y de la novela que tengo entre manos.
Soñar, ilusionarse, apostar por un futuro mejor, sonreír… Hay tantas emociones y tantos actos conscientes que nos ayudan a vivir experiencias maravillosas, tantos momentos en los que solo importa el ahora para exprimirle el jugo hasta hartarse…
A veces los sueños duelen, sobretodo cuando los deseas con tanta intensidad que necesitas tocarlos con las manos. Con el tiempo he aprendido la mejor terapia contra esos sentimientos, la única capaz de disociar mis anhelos de mi realidad.
Una sonrisa diaria, una palabra de ánimo, un gracias, un darlo todo sin detenerse a pensar, un te quiero… Cualquier pequeño gesto puede tranquilizar el espíritu y darte alas para ser feliz, solo depende de ti.
Escribir para mí es algo necesario, igual que lo es respirar, comer o dormir. Mi cabeza no para de inventar, de perderse en los mundos imaginarios que crean laberintos intrincados. Mis personajes crecen en mi interior, muestran su manera de actuar, su personalidad, sus debilidades y sus virtudes a través de mis sentimientos.
A veces cierro los ojos y me traslado al lugar donde moran las historias, aterrizo en la piel de una protagonista y le presto mis desvelos. Es perfecto caminar de su mano, observar a través de sus ojos una realidad alternativa, sentir desde su interior las pasiones, los miedos, las arremetidas de la aventura que le hago vivir.
Es tan difícil explicar esa extraña simbiosis… Ayer me preguntaban cómo inventaba las tramas y yo les insistía en que no lo hago de manera consciente, que es mi cabeza la que decide los giros argumentales, es como si fuera un ente autónomo que me sorprende incluso a mí.
Este año ha sido muy fructífero, he escrito tres novelas en diez meses, he conseguido algo que hacía tiempo tenía en mente, pero nunca lograba concretar por culpa de mis devaneos con la fantasía: una serie de una policía, una que incluyera crímenes, investigaciones y relaciones interpersonales.
Ahora estoy con algo complicado, una novela donde la pasión desenfrenada es parte de la trama principal. No renuncio a los crímenes ni a las tramas policíacas ni a indagar en el fondo de los personajes. Intento mirarlos desde una perspectiva distinta que otras veces, concederles un entono que es importante en su ahora y un pasado oculto que deben encontrar.
Espero conseguir lo que me propongo, aunque la escritura dure meses o años o un tiempo largo. No sé si alguna vez veré en papel mis creaciones, si la vida tiene reservado un lugar para mis novelas ni si conseguiré vivir de la literatura, pero el fuego de la creación arde con intensidad en mi interior y no voy a permitir que se apague sin darlo todo.
Seguro que vale la pena…
¡Feliz día! J

  

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Gran día

10:01 Pat Casalà 8 Comments

¡Buenos días! No parece que el sol quiera acompañarnos en este 21 de diciembre, pero estoy tan feliz que me da igual, encuentro las sonrisas en cada pequeño detalle de mi inicio de las vacaciones de invierno. No sé si tengo  la cabeza demasiado centrada en la escritura ni si avanzaré en EDP, no voy a ponerme ninguna obligación ni a pensar en qué haré, me dejaré llevar por la inercia de la serenidad y de la tranquilidad de no tener obligaciones laborales.
Ayer terminamos la jornada laboral con un concurso de tapas emocionante y un reparto de premios. Competimos con un montadito japonés que consistía en una oblea de arroz de sushi, que se hace en la sartén, acompañada por un puré de aguacate y un tartar de salmón.
¡Ganamos! Es el segundo año consecutivo que nos llevamos el galardón a la tapa más sabrosa. Si tenemos en cuenta que el nivel de este año era superior al del pasado, nos podemos sentir muy orgullosos.
Destaco la compenetración que tenemos en la oficina, nuestra planificación y la capacidad de trabajar en equipo. Unas semanas antes del concurso nos reunimos para pensar qué haremos, luego miramos vídeos en Internet para encontrar la mejor receta para nuestra creación y al final nos dividimos el trabajo de manera equitativa.
Después de la degustación, del reparto de premios y de felicitar la Navidad a los miembros de los equipos, nos fuimos a la oficina a abrir la botella maxi de cava que nos dieron de premio. Trajeron jamón, bocadillos, dulces… Y hablamos distendidamente con los jefes, con los compañeros, con personas que tienen mucho que explicar.
Luego nos fuimos algunos a cenar a un restaurante del centro de Barcelona para acabar de despedirnos antes de las fiestas. Acabamos a las dos de la madrugada con abrazos e ilusiones.
¡Es genial trabajar con gente así!
Tengo deberes laborales y de inglés estas fiestas. Debo pensar, organizar mi cabeza y definir cómo encararemos la recta inicial de varios proyectos que llegarán a mercado durante el primer trimestre de 2014. Y debo recapacitar mucho, así que buscaré momentos en las vacaciones para darle vueltas a la situación.
Lo que tengo claro es que este ambiente laboral tan fantástico no lo voy a encontrar con facilidad y que es absurdo plantearse cambiarlo. A ver dónde me conduce la vida…
¡Feliz día! J

  

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Concurso de tapas

7:07 Pat Casalà 0 Comments

      ¡Buenos días! Parece que mi última jornada de trabajo antes de las vacaciones se presenta movidita y divertida. Al mediodía tenemos la comida de empresa, una en la que competimos por equipos en un concurso de tapas. El año pasado ganamos, a ver qué pasa hoy…
      La costumbre de mi trabajo es reunir al grupo de investigación con la parte privada y hacer dos concursos al año, uno de pasteles en verano y ahora el de tapas.
      Es increíble lo bien que trabajamos en equipo en la oficina, nos organizamos con facilidad, nos distribuimos el trabajo, decidimos qué hacer en una reunión matutina tomando un café… Si hay algo que quiero resaltar de mi trabajo es el buen ambiente que se respira cada día.
      Estoy muy contenta, para qué nos vamos a engañar. Me hace ilusión la comida navideña de empresa y luego la cena que hemos organizado los compañeros. Si a esos ingredientes le añades que después me voy de vacaciones diecisiete días, hace un cóctel emocionante.
      Tengo varios propósitos para 2014, muchas ideas para crear nuevas tramas, quiero cambiar cosas, sonreír todavía más y avanzar en una dirección correcta en mi vida laboral. Sé que para conseguir metas hay que trabajar duro, por eso me llevo deberes estas vacaciones…
       No adelantaré mi balance de fin de año ni empezaré a enumerar los proyectos que quiero emprender el año que viene. De momento hoy voy a disfrutar del día, del concurso, del pica-pica del mediodía y de la cena, de las buenas vibraciones que hay en el despacho…
       Necesito tomar algunas decisiones, centrarme y ver las cosas con perspectiva, así que me tomaré dos días sabáticos para descansar, conversar en buena compañía y pasear. Me propongo ir mañana al cine, comprar lo que necesito para la cena de Nochebuena que preparo en mi casa, envolver los regalos, decorar mi casa, cambiar por fin la ropa del armario…
        ¡A ver qué me trae el Papá Noel! Jejejeje, he sido buena este año, creo…

        ¡Feliz día! J

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Mi primer sushi casero

7:07 Pat Casalà 2 Comments

      ¡Buenos días! Aquí me tenéis, contando las horas para mis vacaciones navideñas y con muchísima ilusión por disfrutarlas en familia. El frío no parece apretar estas jornadas, más bien tenemos una temperatura agradable de finales de otoño.
       Hace ya tiempo que asistí a un curso de preparación se sushi, fue una experiencia agradable, pero nunca me había atrevido a poner en práctica las enseñanzas recibidas. Me daba respeto preparar el arroz, para mí es la parte más difícil, y nunca encontraba un hueco para ponerme con ello.
      Finalmente ayer me decidí a probarlo, hace tiempo que compré los ingredientes necesarios, así que solo me faltaba el pescado que tenía descongelándose en la nevera… Llegué tarde a casa, sin tiempo para preparar el arroz antes de mi clase de baile, comí en un suspiro y me puse manos a la obra. Le envié un Whatsapp a mi querido Fran para desearle felices fiestas y decirle que no podría ir a bailar… ¡Me supo mal!Durante tres horas me dediqué a limpiar el arroz, cocerlo, especiarlo con el vinagre de arroz, dejarlo enfriar, cortar el pescado y un aguacate, montar los makis… Y como no tenía nada mejor que hacer, mientras el arroz se enfriaba me dediqué a preparar unas albóndigas para comer hoy…
      La verdad es que me quedó una cena espléndida, aunque en algunos momentos dudé de mí misma y de mi capacidad para enrollar bien los makis. Como me sobró mucho pescado lo reutilicé para hacer un sashimi y un poco de tartar de salmón sobre una base de aguacate.
      Parece que mi intención de dedicar un poquito de mi tiempo a la cocina es muy positiva, porque durante las horas que me dediqué a ello mi cabeza dejó de pensar en los problemas cotidianos y me ayudó a relajarme y a encontrar una paz necesaria para analizar los últimos acontecimientos.
        Con una gran sonrisa os digo que nada me amargará las magníficas vacaciones que se avecinan. Pienso disfrutar hasta el último segundo con una emoción intensa, dedicarme a escribir, a leer y a cocinar, buscar el tono para esta nueva novela, quizás acabar de corregir LDE, pasear por mi ciudad para ver los escaparates navideños, esquiar algunos días y comer en familia.
       ¡Feliz día! J

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Demasiadas vueltas

7:07 Pat Casalà 2 Comments

      ¡Buenos días! Se acerca un final de año que me reportará muchísimas alegrías, o como mínimo eso espero… Todavía quedan flecos que solucionar y algunas cosas que debo resolver, pero en general creo que 2014 puede ser un gran año.
      Cada uno de nosotros tenemos partes de nuestro carácter que deberíamos cambiar, yo no soy diferente y sé que no soy perfecta. Mi reto para el nuevo año será modificar algunos rasgos que me impiden reaccionar con agilidad frente a algunas situaciones.
      Tengo tendencia a darle demasiadas vueltas a las cosas y a interpretar las conversaciones desde distintos ángulos una vez han pasado. Hoy no he pegado ojo, mi cabeza no dejaba de pensar en algunas cosas importantes que escuché ayer y de plantarme maneras distintas de entenderlo.
      Necesito que mi cabeza colabore cuando toca y, sobre todo, no tomarme las cosas tan a pecho, hacerlo significa no distanciarme lo suficiente para analizar los datos con perspectiva, y eso muchas veces repercute en mi reacción inmediata. Así que reto fijado, energías redirigidas y fuerza para avanzar.
      Me encanta marcarme metas y luchar para conseguirlas, es una manera perfecta de cambiar las ideas que me oscurecen o las realidades que me disgustan. Creo que todos deberíamos hacerlo, caminar hacia algo mejor con la ilusión de conseguirlo.
      Uno de los desafíos más difíciles de mi vida fue el de dejar atrás aquella obsesión enfermiza por publicar. Me costó muchas horas de sugestión mientras redimensionaba mis expectativas, muchos posts  positivos para convencerme de la importancia de ser feliz con lo que se tiene y muchas dosis de autoconfianza.
      Tras batallar con uñas y dientes lo logré, ahora ya no pienso que lo más importante en mi vida sea publicar, soy consciente de lo feliz que me hace la escritura y espero que las historias me acompañen siempre. No renuncio a mi sueño, sigo con un deseo sano de lograrlo y sé que seguiré trabajando para escribir cada día mejor, aunque sin la necesidad imperiosa de que mi vida cambie de un día para otro.
      Así quiero conseguir mi nuevo reto, sin modificar mi optimismo ni mi capacidad para emocionarme con cada pequeño momento. Para mí es importante dar este paso, lograr que cuando me enfrento a conversaciones difíciles mi capacidad de reacción sea inmediata y no posterior, evitar que mi cabeza se pase la noche dándole vueltas a lo que tendría que haber dicho…
      Energía positiva para sonreír todo el día, parece que se presenta con sol…
      ¡Feliz día! J

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